Ahora que tengo la libertad para presentarme me gusta decir que solo soy el resultado de un montón de etiquetas que he ido acumuando durante mi vida.
Muchas de ellas impuestas otras solicitadas y algunas deseadas.
Soy la experiencia en forma de mujer, empresaria, escritora, madre, amiga, etc... y en los últimos años priorizo aprendizajes sobre el bienestar emocional, nuestro equilibrio mental y las diferentes formas de encontrar la estabilidad y fortaleza para afrontar nuestros retos de vida.
Desde muy pequeña me gustaba leer libros y a la vez, anotar en una pequeña libreta las frases que me inspiraban a reflexionar. Cuanto mas pequeña era la frase y mas concentrado quedaba el mensaje me conectaba mejor con el contenido que encerraba.
¿Sabes lo que buscaba realmente? claridad, verdades absoultas sobre las que montar mi vida esperando hacer las cosas bien y no equivocarme. Pero no funciona así. No fue lo esperado ni mis expectativas, me equivoqué cientos de veces y realicé acciones que no eran exitosas.
Pero nadie me habló de crecer en la parte personal, espiritual o emocional para afrontar lo que ocurría mientras estudiaba, ganaba dinero, viajaba, vivía mi adolescencia y juventud.
La formación y el dinero son un mínimo pero nunca un absoluto.
Fué en el año 2017 cuando la vida me envía de nuevo uno de esos golpes que sabes que va a cambiarlo todo, el momento en el que decido que tengo que aprender a parar los balones que me llegan. Una evidencia llego con mucho peso: "Tiene que existir otra manera de hacer mi curriculum menos ajetreado porque me rodean personas con mayores retos que el mio y ellos tienen la capacidad de superarlos, sonreir y vivir con un estado de ánimo positivo ¿puedo hacer algo?" La respuesta es SI, dejar de esperar.
Siguiendo el simil de los balones. Imagina que te lanzán uno sin avisar y estas mirando hacia otro lado ¿puedes imaginar que ocurre? casi seguro que te van a dar, te van a sorprender y quizas te hagan daño. Cuando te repones del golpe llega otro balón y después otro balón.
¿Qué esta ocurriendo? Levantas la vista, miras alrededor y te das cuenta que eres el portero de un gran partido de futbol. En cuanto te apoderas de la situación tambíen te empoderas. Cuando miras hacia la dirección correcta y tomas conciencia de tus habilidades te has transformado en la pieza fundamental del evento, tu vida.
Podrás ves el grado de crecimiento y superación que te corresponde al medirte con el tamaño de la barrera que te impide seguir hacia delante.
Lo importante estaba ocurriendo dentro de mi pero no era consciente hasta que el agotamiento fue total . En ese momento te planteas cambios y empiezas a buscar nuevas herramientas.
Me alegro de que los libros sobre desarrollo personal, autoestima, como motivarse, etc. inunden las librerias porque eso significa que miramos hacia nosotros. Ahora mis reflexiones y cartas a mi hija formán parte de este movimiento, Soñando Pasión y Quien camina a tu lado.
